La coma

Niño jugando tuba
Desde temprana edad(,) Adolfo demostró interés por la música..  Thomas Barwick/Getty Images

La coma es un signo de puntuación utilizado para señalar una breve pausa dentro de la oración. Tiene la forma de un pequeño gancho (,) y se escribe pegada a la palabra o signo que le precede y debe estar separada por un espacio de la palabra o signo que le sigue.

La coma es uno de los signos ortográficos más utilizados.

Ejemplos:

Al aparecer Augusto a la puerta de su casa extendió el brazo derecho, con la mano palma abajo y abierta, y dirigiendo los ojos al cielo quedose un momento parado en esta actitud estatuaria y augusta.
Extraído de "Niebla", de Miguel de Unamuno. Wikisource
Aquí no había bóveda gótica, ni ventana con primorosas labores, ni el fondo obscuro, los misteriosos efectos de luz con que el artificio de la pintura nos presenta los escondrijos de esos químicos aburridos, que, envueltos en ilustres telarañas, se inclinan perpetuamente sobre un mamotreto lleno de garabatos.
Extraído de "La sombra", de Benito Pérez Galdós, Wikisource

La función de la coma

Si bien la función principal de la coma se ha definido siempre como una débil pausa en una secuencia de palabras existirán algunos casos en que no será necesario indicar con la coma determinadas pausas breves en la lectura.

Al respecto, la ortografía de la lengua española señala como ejemplo las comas que se utilizan entre sujeto y predicado.

Por ejemplo, en el enunciado: Cuando Marcelo llegó, estaba tan cambiado que todos quedaron sorprendidos.

En esta oración no existe la necesidad de una coma, por más que al pronunciarse se produce una pausa y una inflexión tonal.

Uso obligatorio y opcional de la coma

Uso opcional

Existen casos en que el uso de la coma depende de quien escribe, del tono y el estilo que quiere dar a lo redactado por él. La pausa que la coma puede proporcionar en estos casos no altera el significado y el mensaje que la oración quiere dar a entender.

Ejemplos:

Roberto y yo íbamos a ir al partido(,) pero(,) al final(,) cambiamos de opinión.

Cuando mi tía llega a mi casa(,) a veces(,) salimos de compras.

A las diez de la mañana(,) tengo clases.

Desde temprana edad(,) Adolfo demostró interés por la música.

En los ejemplos citados, el uso de la coma es opcional porque su ausencia no afectará al sentido del enunciado.

Uso obligatorio

En los usos obligatorios, sucede lo contrario. El uso de la coma en estos casos sirve para que se pueda distinguir los diferentes significados que una oración puede tener.

Ejemplos:

Así debes arreglarte para la ceremonia (indica la idea que “de esa manera hay que arreglarse para la ceremonia")

Hoy se casa Juan y Andrea. Así, debes arreglarte para la ceremonia. (en cambio en este caso, el uso de la coma produce una consecuencia en particular. Es decir, la coma permite interpretar que, debido a que “Juan y Andrea se casan, por consiguiente, debes arreglarte para la ceremonia")

Proferí el discurso, como me dijeron ( me han dicho que profiriera un discurso)

Proferí el discurso como me dijeron (me han dicho que cómo debía proferir el discurso)

En los anteriores ejemplos, el uso o la ausencia de la coma puede alterar completamente el significado de la oración. Es decir, la coma tiene una función distintiva porque permite diferenciar los diversos sentidos que una oración puede tener.

Uso de la coma y otros signos de puntuación

Habíamos dicho que la coma es utilizada para señalar la producción de una breve pausa en el enunciado y otras veces su uso tiene un matiz expresivo, dependiendo de lo que se desee expresar en la oración.

Existirán casos en que la coma, así como otros signos de puntuación como el punto y coma. puedan ser utilizados en el mismo lugar en la oración y la elección de uno de ellos dependerá de la voluntad de quien redacte.

Tomemos como ejemplo la oración:

Arnaldo tuvo éxito; ahora él tiene un nuevo futuro.

Arnaldo tuvo éxito, ahora él tiene un nuevo futuro.

En este enunciado el uso de la coma o del signo de puntuación dependerá de qué tipo de pausa prefiere otorgarle quien escriba dicha oración.

Tampoco es recomendable abusar de la coma en detrimento de otros signos de puntuación. En algunos enunciados es preferible utilizar el punto y coma para introducir una pausa y bien los dos puntos.

Veamos un ejemplo:

Antonio sabia tocar la guitarra, se tomaba su tiempo en afinar aquel instrumento, grande, hermoso, delicado.

La misma oración queda mejor redactada utilizando un punto y coma y los dos puntos:

Antonio sabia tocar la guitarra; se tomaba su tiempo en afinar aquel instrumento: grande, hermoso, delicado.